Lily Allen asegura que West End Girl 'no es un álbum cruel'
La cantante de 40 años lanzó su primer LP desde No Shame de 2018 la semana pasada, y el contenido dejó atónitos a sus fans, ya que parecía revelar la ruptura de su matrimonio con David Harbour.
Lily Allen ha insistido en que West End Girl “no es un álbum cruel”.
La cantante de 40 años lanzó su primer LP desde No Shame de 2018 la semana pasada, y el contenido dejó atónitos a sus fans, ya que parecía revelar la ruptura de su matrimonio con David Harbour en medio de especulaciones de infidelidad por parte de él, pero ella no siente que haya sido "mala" con la estrella de Stranger Things al expresar públicamente sus sentimientos.
En declaraciones a la revista Interview, afirmó: "No es un álbum cruel. No siento que esté siendo mala. Simplemente reflejaba los sentimientos que estaba procesando en ese momento".
Lily se encuentra ahora en un estado mental diferente al de cuando escribió el disco y no siente la necesidad de "venganza".
Ella dijo: "Quiero decir, escribí este disco en 10 días en diciembre y ahora veo toda la situación de una manera muy diferente. Todos pasamos por rupturas y siempre es jodidamente duro. Pero no creo que sea muy frecuente sentir la necesidad de escribir sobre ello mientras estás en medio de la ruptura. Eso es lo divertido de este disco; es como vivirlo visceralmente, como un proceso mecánico. En aquel momento, estaba intentando procesar las cosas y eso es genial para el álbum, pero ahora no me siento confundida ni enfadada. No necesito venganza”.
Pero recalcó que el disco no era del todo autobiográfico.
Ella dijo: "Parte de ello se basa en la verdad y parte es fantasía".
La intérprete del éxito Smile consideró importante no ser vista como una "víctima" en las canciones.
Ella dijo: "Sí, volvimos a grabar y ajustamos algunas cosas. Para mí era muy importante no sonar como una víctima, así que decía: 'Tenemos que cambiar esa frase. Suena demasiado a ‘¡Pobre de mí!'. Quería que se sintiera brutal y trágico, pero también empoderador, que hubiera alegría en poder expresarlo. Sobre todo hoy en día, cuando estamos tan desconectados por culpa de nuestros teléfonos inteligentes. Es como decir: ‘¡Madre mía, estoy sintiendo cosas!’. Siempre quiero sentir cosas, por eso soy drogadicta y alcohólica. Busco desesperadamente esa sensación. El desamor también es un puto regalo... Es algo con lo que todo el mundo se puede identificar. Por eso el 98 por ciento de las canciones tratan sobre el amor o la soledad”.